Todo transportista peruano sabe cuán importante es mantener en óptimas condiciones la “salud” de su vehículo, especialmente al recorrer rutas largas o los complejos caminos de nuestro territorio. Por ello, el temor a comprometer su principal herramienta de trabajo lleva a muchos conductores a enfrentar dificultades para distinguir información confiable de aquella que no lo es. Un ejemplo recurrente y crucial para el buen mantenimiento del vehículo es el relacionado con el cambio de aceite.
Sin duda, este punto es importante para mantener a tope el rendimiento de un camión, prevenir daños durante las operaciones más exigentes y, por lo tanto, evitar incurrir en gastos imprevistos. Por ello, los especialistas de FUSO, marca japonesa representada por Astara en Perú, aportan claridad sobre el tema confirmando o desterrando los mitos más comunes referente al cambio de aceite en camiones:
- “Debemos seguir las recomendaciones del fabricante y adaptar los intervalos al uso específico” – Verdad. Aunque es importante considerar que el manual del camión ofrece pautas generales, el plan de mantenimiento más adecuado debe adaptarse a las condiciones reales de uso del vehículo, considerando las exigencias de las rutas. Para garantizar un cuidado óptimo, lo ideal es seguir el plan de mantenimiento recomendado por la red de concesionarios autorizados, quienes cuentan con la experiencia y los recursos necesarios para atender las necesidades específicas de cada camión.
- “Todos los aceites son adecuados para cualquier tipo de camión” – Mito. Este es un error común que puede afectar seriamente la eficiencia del motor. La elección del aceite no depende únicamente del tipo de motor, sino de las recomendaciones específicas del fabricante, los resultados de pruebas de aceite y la tecnología del vehículo, especialmente en lo relacionado con los estándares de emisiones. Utilizar el aceite adecuado cuida y garantiza un desempeño óptimo, así como una mayor protección en condiciones exigentes.
- “Se debe usar aceite diseñado para camiones y según el tipo de operación” – Verdad. Seguir esta regla, especialmente si se opta por un lubricante sintético de alto rendimiento, contribuye a alargar la vida útil y mejorar la eficiencia del motor. Estos aceites, conocidos como multigrado, no solo ofrecen una mejor resistencia al calor durante largas horas de recorrido, sino que también están diseñados para adaptarse a los cambios de temperatura, desde climas fríos hasta condiciones de calor extremo muy comunes en nuestro territorio, asegurando un desempeño óptimo en cualquier situación
- “Es necesario revisar el nivel de aceite regularmente y rellenarlo si es necesario” – Verdad. Más allá del color del aceite, que puede variar por su uso. Utilizar la varilla de medición es la forma más sencilla y efectiva de verificar si el nivel está dentro del rango adecuado. Mantener el aceite en su nivel óptimo no solo garantiza una correcta lubricación, sino que también previene el desgaste prematuro cuidando las piezas del motor.
- “Los aditivos siempre aumentan el rendimiento del motor” – Mito. No se trata de la calidad del aceite, sino de usar el lubricante recomendado para el tipo de operación del vehículo. En cuanto a los aditivos, no son imprescindibles para el rendimiento en condiciones normales, pero algunos, como los limpiadores de motor, cumplen funciones específicas y pueden ser útiles si están indicados dentro del plan de mantenimiento recomendado por el fabricante.
Tener en cuenta esta información permitirá optimizar el uso de un valioso recurso como el aceite y favorecer el rendimiento del camión. Esto es algo esencial para los camioneros, quienes además de conducir sus vehículos deben velar en muchos casos por la rentabilidad de sus emprendimientos y negocios generando ahorros e impulsando su productividad.
